Terapia de Habituación al Acúfeno

Entre el 5 y el 10 % de la población sufre acúfenos. Son ruidos percibidos en los oídos o la cabeza sin que una fuente exterior los produzca. En realidad, cualquiera de nosotros hemos podido experimentar alguna vez estos pitidos. Sin embargo, la mayoría de esas personas no acuden a un especialista porque no creen que suponga un problema.

Cuando nuestro cerebro recibe por primera vez un estímulo nuevo, como podría ser el acúfeno, es normal que salten ciertas alarmas hasta su identificación. Durante este proceso, la vía auditiva comparte información con otras estructuras centrales que ayudan a dar significado a lo oído. Es en esta interrelación de mecanismos donde se origina el acúfeno molesto, que es el que requerirá intervención, ya que puede llegar a afectar a nuestra calidad de vida.

Muchas veces estos pitidos o zumbidos van acompañados de algún grado de pérdida auditiva. Sin embargo, también pueden aparecer en personas con audición típica. En cualquiera de los dos casos, el tratamiento es el mismo.

A día de hoy, la TRT —o Terapia de Habituación al Acúfeno— es la terapia con mayor tasa de éxito (superior al 85 %). Su objetivo es restaurar la normalidad en el funcionamiento de la vía auditiva convirtiendo el acúfeno en un estímulo neutro y subconsciente que no sea percibido por el paciente. Para ello se combinan sesiones educacionales con terapia sonora. La duración media de esta terapia suele ser de 1 – 2 años, aunque se ha descrito en la literatura que los pacientes comienzan a apreciar una mejora significativa a partir de los 6 meses de intervención.